Hoy martes 27 de agosto se realizará una nueva Marcha Nacional Contra el Gatillo Fácil, de forma simultánea en varias provincias del país. CORREPI estará presente en CABA, Córdoba, Mar del Plata y Mendoza.
Esta jornada nacional busca visibilizar la represión del estado que se despliega de forma uniforme en todo el país, como también reafirmar que a estas políticas las enfrentamos con organización y lucha.
Registramos que, desde 1983 hasta febrero de este año, se cometieron más 6.500 muertes a manos de las fuerzas represivas. Esta cifra continúa aumentando y es el resultado de una política de estado descargada diariamente sobre la clase trabajadora, teniendo como punta a las juventudes de los barrios populares, nuestrxs pibes, pibas y y disidencias sexuales y de género.
El gatillo fácil es política necesaria de todos los gobiernos que administren un estado capitalista, una política de estado que tiene como fin mantener el orden social y disciplinar a quienes más afecta este sistema.
Si bien todos los gobiernos desde la vuelta a la democracia han sostenido y profundizado el gatillo fácil, Cambiemos es el más represivo desde entonces. Un gobierno que ajusta y profundiza la pobreza, necesita de la mano dura para hacerlo y es, en ese sentido, que desde hace casi 4 años, las muertes en manos del aparato represivo no paran de aumentar, dejando unx pibx asesinadx en manos del aparato represivo estatal cada 21hs.
A Cambiemos no le alcanzó con premiar a policías asesinos, instalando así la doctrina Chocobar, mandado el mensaje de disparen tranquilos que acá salimos a bancarlos, sino que el 3 diciembre del 2018, a través de la Resolución 956/2018, legalizó el uso de las armas de fuego para las fuerzas federales, en situaciones siempre usadas como “excusas” por los policías asesinos después de disparar y asesinar a lxs pibxs.
Las fuerzas represivas gozan de impunidad para disparar y asesinar también gracias a los medios hegemónicos de comunicación y el sistema judicial que se encargan de modificar las versiones para revertir la responsabilidad de los hechos hacia las víctimas. Solo con lucha y organización hemos logrado, en algunos casos, llevarlos al banquillo y la condena.
Desde CORREPI venimos denunciando desde hace más de 25 años que el gatillo fácil es política de estado, que no son excesos; no es un solo policía, sino toda la institución. Nuestra herramienta para denunciar estos asesinatos es nuestro Archivo de Casos, el cual armamos luego de una exhaustiva búsqueda, porque la gran mayoría de los casos quedan recluidos en los ámbitos en donde ocurrieron, impunes, bajo el manto legitimador de “actos de servicio”, “combate contra el crimen”, etc.
Este escenario nos demuestra que es indispensable profundizar y fortalecer la lucha antirrepresiva en todo el país.
Por eso una vez más salimos a las calles a gritar: