El 1 de Junio de 2014, Pablo Olivera fue asesinado por un policía que lo golpeó con su tonfa en la cabeza.
La lucha incansable de la familia, amigxs y compañerxs de Pablo hicieron que en 2021 se logrará condenar al asesino de Pablo. Este es uno de los ejemplos del fruto de la lucha y fortalece nuestro reclamo para que las medidas de aplicar una política contra la represión estatal se implementen.
Compartimos palabras de Patricia, mamá de Pablo y compañera de CORREPI.
“Un 1 de junio te mandé a divertirte sin saber que ibas a encontrar la muerte y desde ese día no puedo perdonarme tu muerte absurda. Menos iba a pensar que dos policías criminales iban a dar fin a tu vida. Gracias a CORREPI y sus dos buenos abogados fue que le dieron perpetua a uno de ellos, al que mató a mi hijo, pero igual sigo viviendo el día a día y sintiendo tu ausencia hijo mío. Tus locuras y tus carcajadas siempre van a estar en nuestro corazón.“